¿Cuáles son esos principios tan especiales?

Entre sus ingredientes, destacan:

• Aceite de semilla de Rosa mosqueta. Este aceite desafiante es una fuente natural de vitaminas A y C y reduce el daño solar. Estudios recientes han demostrado su capacidad para contribuir a la reducción y prevención de arrugas y manchas de la edad. Su alta concentración de Retinol (vitamina A) ayuda a mejorar la regeneración celular y estimula los niveles de colágeno y elastina, al mismo tiempo que alisa las líneas finas y brinda un brillo saludable. El aceite de semilla de rosa mosqueta también contiene ácidos grasos esenciales y vitamina E, que contribuyen a la reducción del tamaño de los poros.
• Aceite de Moringa. Con un impresionante contenido de ácido oleico del 72%, la moringa contiene 47 potentes antioxidantes, 36 compuestos antiinflamatorios, 18 aminoácidos esenciales, 7 veces la vitamina C de una naranja, 3 veces el hierro de una almendra, 4 veces el calcio de la leche y el doble de la vitamina A que se encuentra en una zanahoria. Las increíbles propiedades rejuvenecedoras de este aceite liviano y lujoso penetran profundamente en la piel, por lo que los minerales y las vitaminas agotados pueden repararse y revivir naturalmente. Uno de los aceites más densos en nutrientes del mundo, la moringa ayuda a disminuir las líneas finas, la piel manchada y cicatrizada, revelando una piel suave con un brillo vital. Es famoso por su capacidad antienvejecimiento, contaminación y lucha contra el acné.
• Aceite de Espino amarillo. Aporta nutrientes a la piel gracias a que las moléculas son lo suficientemente pequeñas como para penetrar a mayor profundidad. Protege la piel de la radiación UV y del daño de los radicales libres y posee propiedades antiinflamatorias.
• Aceite de Melocotón silvestre del Himalaya. Es un excelente emoliente. Hidrata y rejuvenece la piel, dejándola suave, flexible, luminosa y protegida de las duras condiciones ambientales. Además, ayuda a fortalecer la barrera de la piel.
• Aceite de Granada. Impulsa la renovación celular y la producción de colágeno. El aceite de granada estimula la proliferación de queratinocitos, lo que promueve la regeneración de la piel, ayudando a repararla y a conservar su apariencia juvenil al crear nuevas células.
• Aceite de Incienso. Calmante, antimicrobiano, desintoxicante y astringente. Se utiliza para limpiar y proteger la piel irritada, reducir los poros y eliminar las bacterias, a la vez que calma el enrojecimiento y estimula la cicatrización.
• Aceite de semilla de Camelia. Penetra fácilmente en la piel sin obstruir los poros para nutrirla.

¿Qué más podemos pedir?

No contiene parabenos, sulfatos, sintéticos, ingredientes GMO (Organismos Genéticamente Modificados), perfume ni color; únicamente plantas prensadas en frío y maceradas. Creado a partir de ingredientes 100 % vegetales, frescos, sin procesar y orgánicos. Todos los ingredientes se recolectan de manera 100 % silvestre por agricultores tribales de India. Es el primer aceite 100 % ecológico del mercado, creado a mano con una cadena de suministro transparente. El frasco está hecho de cristal biofotónico, un filtro natural de luz solar visible que solo transmite rayos UV e infrarrojos. Esto mejora la calidad y protege los botánicos sensibles en ‘Kaylana’.

Certificaciones: ECOCERT; Ingredientes certificados como COSMOS; Vegano.

Sus rigurosas pruebas de calidad clínica nunca involucran animales. Todos sus productos son biodegradables y han sido obtenidos de recursos renovables.